La familia es el primer camino y el más importante
Del Plan Pastoral Congregacional, n.25
Como testigos y apóstoles del misterio de Nazaret, en el desempeño de nuestra misión apostólica, no olvidamos que “entre los numerosos caminos de la existencia humana la familia es el primero y el más importante” (Carta a las familias 1,1)
El objetivo pastoral de “hacer un Nazaret en cada hogar” es para nosotros un reto que asumimos y realizamos principalmente, por medio de la consagración de las familias a la Sagrada Familia y ayudándolas a vivir los valores de Nazaret entre los que sobresalen: el respeto, la acogida, la relación interpersonal y el diálogo, el perdón, la aceptación de los planes de Dios, la vida de fe...
Pero el anuncio de la verdad de la familia no se puede desvincular del anuncio de la verdad y del matrimonio, que es su origen y su fuente. Matrimonio y familia son realidades diferentes, pero tan estrechamente relacionadas, que si se separan, el uno y la otra terminan por desvanecerse.
En estos últimos años se ha ido acrecentando la convicción de que el matrimonio es el fundamento de la familia y de que toda la espiritualidad familiar arranca de la espiritualidad conyugal.
Del Plan Pastoral Congregacional, n.25
Como testigos y apóstoles del misterio de Nazaret, en el desempeño de nuestra misión apostólica, no olvidamos que “entre los numerosos caminos de la existencia humana la familia es el primero y el más importante” (Carta a las familias 1,1)
El objetivo pastoral de “hacer un Nazaret en cada hogar” es para nosotros un reto que asumimos y realizamos principalmente, por medio de la consagración de las familias a la Sagrada Familia y ayudándolas a vivir los valores de Nazaret entre los que sobresalen: el respeto, la acogida, la relación interpersonal y el diálogo, el perdón, la aceptación de los planes de Dios, la vida de fe...
Pero el anuncio de la verdad de la familia no se puede desvincular del anuncio de la verdad y del matrimonio, que es su origen y su fuente. Matrimonio y familia son realidades diferentes, pero tan estrechamente relacionadas, que si se separan, el uno y la otra terminan por desvanecerse.
En estos últimos años se ha ido acrecentando la convicción de que el matrimonio es el fundamento de la familia y de que toda la espiritualidad familiar arranca de la espiritualidad conyugal.
GUÍA DEL PHSF |
No hay comentarios:
Publicar un comentario