1 Reyes 20,1-12
20:1 Ben Hadad, rey de Arám, reunió todo su ejército, y acompañado de treinta y dos reyes, con caballería y carros de guerra, subió a combatir contra Samaría y la sitió.
20:2 Entonces envió mensajeros a la ciudad, a Ajab, rey de Israel,
20:3 para decirle: "Así habla Ben Hadad: Tu plata y tu oro me pertenecen, y también me pertenecen tus mujeres y tus hermosos hijos".
20:4 El rey de Israel respondió diciendo: "¡A tus órdenes, rey, mi señor! A ti pertenecemos yo y todos mis bienes".
20:5 Pero los mensajeros regresaron y dijeron: "Así habla Ben Hadad: Mando a decirte que me entregues tu plata y tu oro, tus mujeres y tus hijos.
20:6 Así que mañana, a esta misma hora, te enviaré a mis servidores: ellos registrarán tu casa y las casas de tus súbditos; se apoderarán de todo lo que tú más quieres, y se lo llevarán".
20:7 El rey convocó a los ancianos del país y les dijo: "¡Fíjense bien cómo ese hombre trata de arruinarme! Porque cuando me reclamó mis mujeres y mis hijos, mi plata y mi oro, yo no le negué nada".
20:8 Todos los ancianos y todo el pueblo le dijeron: "¡No lo escuches! ¡No aceptes!"
20:9 Entonces él replicó a los mensajeros de Ben Hadad: "Díganle al rey, mi señor: Haré todo lo que me mandaste la primera vez; pero esto otro no lo puedo hacer". Los mensajeros se fueron y llevaron la respuesta.
20:10 Ben Hadad le mandó a decir: "Que los dioses me castiguen, si queda bastante polvo en Samaría para que cada uno de mis hombres recoja un puñado".
20:11 Y el rey de Israel respondió: "Díganle: ¡No hay que cantar victoria antes de tiempo!".
20:12 Apenas oyó esta palabra, Ben Hadad, que estaba bebiendo con los reyes en las tiendas de campaña, ordenó a sus servidores: "¡A sus puestos!". Y ellos tomaron posiciones frente a la ciudad.
20:1 Ben Hadad, rey de Arám, reunió todo su ejército, y acompañado de treinta y dos reyes, con caballería y carros de guerra, subió a combatir contra Samaría y la sitió.
20:2 Entonces envió mensajeros a la ciudad, a Ajab, rey de Israel,
20:3 para decirle: "Así habla Ben Hadad: Tu plata y tu oro me pertenecen, y también me pertenecen tus mujeres y tus hermosos hijos".
20:4 El rey de Israel respondió diciendo: "¡A tus órdenes, rey, mi señor! A ti pertenecemos yo y todos mis bienes".
20:5 Pero los mensajeros regresaron y dijeron: "Así habla Ben Hadad: Mando a decirte que me entregues tu plata y tu oro, tus mujeres y tus hijos.
20:6 Así que mañana, a esta misma hora, te enviaré a mis servidores: ellos registrarán tu casa y las casas de tus súbditos; se apoderarán de todo lo que tú más quieres, y se lo llevarán".
20:7 El rey convocó a los ancianos del país y les dijo: "¡Fíjense bien cómo ese hombre trata de arruinarme! Porque cuando me reclamó mis mujeres y mis hijos, mi plata y mi oro, yo no le negué nada".
20:8 Todos los ancianos y todo el pueblo le dijeron: "¡No lo escuches! ¡No aceptes!"
20:9 Entonces él replicó a los mensajeros de Ben Hadad: "Díganle al rey, mi señor: Haré todo lo que me mandaste la primera vez; pero esto otro no lo puedo hacer". Los mensajeros se fueron y llevaron la respuesta.
20:10 Ben Hadad le mandó a decir: "Que los dioses me castiguen, si queda bastante polvo en Samaría para que cada uno de mis hombres recoja un puñado".
20:11 Y el rey de Israel respondió: "Díganle: ¡No hay que cantar victoria antes de tiempo!".
20:12 Apenas oyó esta palabra, Ben Hadad, que estaba bebiendo con los reyes en las tiendas de campaña, ordenó a sus servidores: "¡A sus puestos!". Y ellos tomaron posiciones frente a la ciudad.
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