1 Reyes 1,28-37
1:28 Entonces el rey David tomó la palabra y dijo: "Llámenme a Betsabé". Ella se presentó al rey y se quedó de pie delante de él.
1:29 Y el rey juró, diciendo: "¡Por la vida del Señor, que me ha librado de todo peligro,
1:30 hoy mismo daré cumplimiento a lo que te he jurado por el Señor, el Dios de Israel, cuando dije: Tu hijo Salomón reinará después de mí y se sentará en mi trono en lugar mío!"
1:31 Betsabé se inclinó con el rostro en tierra y se postró delante del rey. Luego exclamó: "¡Viva para siempre mi señor el rey David!"
1:32 El rey David dijo: "Llámenme al sacerdote Sadoc, al profeta Natán y a Benaías, hijo de Iehoiadá". Ellos se presentaron ante el rey,
1:33 y él les ordenó: "Tomen con ustedes a los servidores de su señor, monten a mi hijo Salomón en mi propia mula y háganlo bajar a Guijón.
1:34 Allí, el sacerdote Sadoc y el profeta Natán lo ungirán rey de Israel; ustedes sonarán la trompeta y lo aclamarán: ¡Viva el rey Salomón!
1:35 Luego volverán a subir detrás de él, y él vendrá a sentarse en mi trono y reinará en mi lugar: yo lo he constituido jefe de Israel y de Judá".
1:36 Entonces Benaías, hijo de Iehoiadá, respondió al rey: "¡Amén! Así lo haga el Señor, el Dios de mi señor el rey.
1:37 Como el Señor estuvo con mi señor el rey, esté también con Salomón y engrandezca su trono más aún que el trono de mi señor el rey David".
1:28 Entonces el rey David tomó la palabra y dijo: "Llámenme a Betsabé". Ella se presentó al rey y se quedó de pie delante de él.
1:29 Y el rey juró, diciendo: "¡Por la vida del Señor, que me ha librado de todo peligro,
1:30 hoy mismo daré cumplimiento a lo que te he jurado por el Señor, el Dios de Israel, cuando dije: Tu hijo Salomón reinará después de mí y se sentará en mi trono en lugar mío!"
1:31 Betsabé se inclinó con el rostro en tierra y se postró delante del rey. Luego exclamó: "¡Viva para siempre mi señor el rey David!"
1:32 El rey David dijo: "Llámenme al sacerdote Sadoc, al profeta Natán y a Benaías, hijo de Iehoiadá". Ellos se presentaron ante el rey,
1:33 y él les ordenó: "Tomen con ustedes a los servidores de su señor, monten a mi hijo Salomón en mi propia mula y háganlo bajar a Guijón.
1:34 Allí, el sacerdote Sadoc y el profeta Natán lo ungirán rey de Israel; ustedes sonarán la trompeta y lo aclamarán: ¡Viva el rey Salomón!
1:35 Luego volverán a subir detrás de él, y él vendrá a sentarse en mi trono y reinará en mi lugar: yo lo he constituido jefe de Israel y de Judá".
1:36 Entonces Benaías, hijo de Iehoiadá, respondió al rey: "¡Amén! Así lo haga el Señor, el Dios de mi señor el rey.
1:37 Como el Señor estuvo con mi señor el rey, esté también con Salomón y engrandezca su trono más aún que el trono de mi señor el rey David".
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