Iban por el camino cuando alguien le dijo:
—Te seguiré a dondequiera que vayas.
—Las zorras tienen madrigueras y las aves tienen nidos —le respondió Jesús—, pero el Hijo del hombre no tiene dónde recostar la cabeza.
A otro le dijo:
—Sígueme.
—Señor —le contestó—, primero déjame ir a enterrar a mi padre.
—Deja que los muertos entierren a sus propios muertos, pero tú ve y proclama el reino de Dios —le replicó Jesús.
Otro afirmó:
—Te seguiré, Señor; pero primero déjame despedirme de mi familia.
Jesús le respondió:
—Nadie que mire atrás después de poner la mano en el arado es apto para el reino de Dios.
(Lucas 9:55-62)
"Enterrar al padre" era una obligacion del hijo para con su padre. Uno de los mandamientos es "honra a tu padre y a tu madre", pues bien, dar sepultura al padre era tambien una manera de honrarlo. Que un hijo no se tomara como un deber y una prioridad los preparativos del entierro de su padre era considerado una ofensa, una deshonra, propia de un mal hijo. Es importante tener esto en cuenta para descubrir el escandalo que provoco la respuesta de Jesus.
Es indudable que en algun momento Jesus sostuvo enfrentamientos con su propia familia y con las familias de algunos de sus seguidores. Por eso, encontramos que el evangelio de Jesus divide a la familia ("el padre contra los hijos, hermanos contra hermanos, madres contra nueras...). Esto nos hace ver que seguir a Jesus no era como atender a las clases de un rabino mas. Jesus no funda una escuela rabinica ni es un maestro que ensena una sabiduria. Las familias adineradas enviaban a sus hijos con maestros de excelente reputacion o los contrataban porque deseaban una "buena educacion" para sus hijos. Sin embargo, el evangelio pone en evidencia no solamente la desconfianza de algunas familias frente al movimiento que lidera Jesus, sino tambien la division que el mensaje de Jesus provoca en el seno de la familia.
Por que? El cabeza de familia o patriarca era el que decidia cual iba a ser el medio de vida de sus hijos. Tambien escogia a la esposa o esposo de sus descendientes, por supuesto, teniendo en cuenta que la familia del o de la pretendiente formara parte de su mismo circulo social y financiero. De ninguna manera se daba la bienvenida a extranos, extrajeros o paganos (gentiles) pues no formaban parte del pueblo de Dios. En el tiempo de Jesus, la familia era una celula de poder, honor y orgullo, que se siente amenazada ante el mensaje y las maneras del profeta de Nazaret.
—Te seguiré a dondequiera que vayas.
—Las zorras tienen madrigueras y las aves tienen nidos —le respondió Jesús—, pero el Hijo del hombre no tiene dónde recostar la cabeza.
A otro le dijo:
—Sígueme.
—Señor —le contestó—, primero déjame ir a enterrar a mi padre.
—Deja que los muertos entierren a sus propios muertos, pero tú ve y proclama el reino de Dios —le replicó Jesús.
Otro afirmó:
—Te seguiré, Señor; pero primero déjame despedirme de mi familia.
Jesús le respondió:
—Nadie que mire atrás después de poner la mano en el arado es apto para el reino de Dios.
(Lucas 9:55-62)
"Enterrar al padre" era una obligacion del hijo para con su padre. Uno de los mandamientos es "honra a tu padre y a tu madre", pues bien, dar sepultura al padre era tambien una manera de honrarlo. Que un hijo no se tomara como un deber y una prioridad los preparativos del entierro de su padre era considerado una ofensa, una deshonra, propia de un mal hijo. Es importante tener esto en cuenta para descubrir el escandalo que provoco la respuesta de Jesus.
Es indudable que en algun momento Jesus sostuvo enfrentamientos con su propia familia y con las familias de algunos de sus seguidores. Por eso, encontramos que el evangelio de Jesus divide a la familia ("el padre contra los hijos, hermanos contra hermanos, madres contra nueras...). Esto nos hace ver que seguir a Jesus no era como atender a las clases de un rabino mas. Jesus no funda una escuela rabinica ni es un maestro que ensena una sabiduria. Las familias adineradas enviaban a sus hijos con maestros de excelente reputacion o los contrataban porque deseaban una "buena educacion" para sus hijos. Sin embargo, el evangelio pone en evidencia no solamente la desconfianza de algunas familias frente al movimiento que lidera Jesus, sino tambien la division que el mensaje de Jesus provoca en el seno de la familia.
Por que? El cabeza de familia o patriarca era el que decidia cual iba a ser el medio de vida de sus hijos. Tambien escogia a la esposa o esposo de sus descendientes, por supuesto, teniendo en cuenta que la familia del o de la pretendiente formara parte de su mismo circulo social y financiero. De ninguna manera se daba la bienvenida a extranos, extrajeros o paganos (gentiles) pues no formaban parte del pueblo de Dios. En el tiempo de Jesus, la familia era una celula de poder, honor y orgullo, que se siente amenazada ante el mensaje y las maneras del profeta de Nazaret.