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jueves, 8 de diciembre de 2016

Bartolomé Esteban Murillo y la Inmaculada Concepción

Bartolomé Estaban Murillo 1678
Museo del Prado, Madrid (España)

Bartolomé Esteban Murillo (1618-1682) fue un pintor español que se llegó a ser reconocido como el pintor de "Inmaculadas".

Durante el siglo XVII muchas Iglesias compiten por tener la imagen de la Madre de Dios con mayor esplendor inmaculado. La Inmaculada Concepción goza de un gran apoyo popular y de la jerarquía eclesiástica en vida de Esteban Murillo.

Ningún otro artista como Murillo fue capaz de capturar la imaginación religiosa del público. Su "vaporoso" estilo fue admirado y copiado. Murillo pinta a la Madre de Dios sobre un fondo celeste, con una misteriosa luz radiante que emerge de la oscuridad . Los ojos de María miran hacia arriba, hacia Dios. En muchas de las más de veinte inmaculadas pintadas por Murillo, María es elevada seguida por querubines y ángeles. Es una apoteosis.

Bartolomé Esteban Murillo 1670
Walters Art Gallery

Murillo fue muy inteligente. El pintor scogió para sus inmaculadas bellas modelos rompiendo las convenciones de la época y evitando a las chicas rubias. Las Inmaculadas de Murillo son jóvenes españolas, cabello oscuro y tez oliva. Fue una fórmula ganadora.

Pero Murillo, siendo hijo de un pobre artesano sevillano, procedía de una familia humilde y el éxito no fue fácil. Durante muchos años se vio obligado a ofrecer sus pinturas en días de mercado, utlizando los colores chillones preferidos por una clientela modesta.

Mostrando mucho coraje, un día Esteban Murillo se encaminó hacia Madrid. Allí suplicó ayuda al gran Velázquez, pintor de la corte de Felipe IV. Velásquez fue generoso con su paisano. Murillo pudo hacer los contactos adecuados y volvió a Sevilla con renovada confianza. El pintor recibió un encargo en un convento Franciscano y, tres años más tarde, al finalizar sus trabajos su futuro ya estaba asegurado. Su carrera como pintor religioso no había hecho más que comenzar.

Bartolomé Esteban Murillo
Museo del Prado


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