Páginas

sábado, 19 de marzo de 2016

Salmo 21: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?

Salmo 21: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?
Domingo de Ramos: ciclos A, B y C

Al verme, se burlan de mí,
hacen visajes, menean la cabeza:
"Acudió al Señor, que lo ponga a salvo;
que lo libre, si tanto lo quiere."
R. Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?

Me acorrala una jauría de mastines,
me cerca una banda de malhechores;
me taladran las manos y los pies,
puedo contar mis huesos.
R. Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?

Se reparten mi ropa,
echan a suertes mi túnica.
Pero tú, Señor, no te quedes lejos;
fuerza mía, ven corriendo a ayudarme.
R. Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?

Contaré tu fama a mis hermanos,
en medio de la asamblea te alabaré.
Fieles del Señor, alabadlo;
linaje de Jacob, glorificadlo;
temedlo, linaje de Israel.
R. Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?

No hay comentarios:

Publicar un comentario