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sábado, 25 de mayo de 2013

SOLEMNIDAD DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD, C, por Julio González, S.F.



Comentario por Julio González, S.F.

Volvemos a reunirnos este domingo para celebrar con gran solemnidad la fe de la Iglesia, nuestra fe. Y la fiesta que celebramos hoy nos presenta una fe que no se identifica con filosofías, cultos esotéricos, leyes y ritos.

El misterio de la Santísima Trinidad —el misterio de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo—, no fue recibido por los apóstoles como una "idea" sino como una "relación de amistad, de amor..., de familia".

Cuando Jesús nos habla del Padre y del Espíritu Santo, nos está hablando de Él mismo. Jesús nos dice que sus palabras y sus obras no le pertenecen: “Cuando me escucháis a mí, escucháis al Padre, porque yo no digo o hago nada por mi cuenta”.

Esta relación tan personal entre Jesús y el Padre llamó la atención de los apóstoles. Por eso, le dicen: “Enséñanos a escuchar al Padre como tú le escuchas, enséñanos a hablarle como tú le hablas, enséñanos a rezar como tú rezas”.

En su oración, Jesús nos acerca al Padre para que también nosotros participemos de esa relación, que no es la relación del Señor y el esclavo, sino la del Padre y el Hijo, la de los hermanos, la de una familia. Esta relación entre Jesús y el Padre se nos muestra con tal intensidad en los evangelios que no podemos conocer a Jesús si le separamos del Padre y sin el Espíritu Santo.

Cuando nosotros no participamos en esta relación de amistad, de amor y de familia, entonces, todos (obispos, sacerdotes, familias) corremos el peligro de convertirnos en una institución más donde las estructuras parecen ser más impotantes que las personas.

Cuando el amor, la pasión, el sacrificio de Jesús... no es sal o levadura en nuestras relaciones personales, entonces, son las normas, los preceptos y las leyes, lo que nos mantiene unidos. Pero la Iglesia no es una institución más, pues el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo nos llaman a ser familia, sintiendo y colaborando en esa relación de amor y entrega que les une a ellos.

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